Bodybalance es lo último en los gimnasios del primer mundo, y combina principios y técnicas como pilates, yoga y tai-chi, entre otras, para llevar a cuerpo y mente a un estado de equilibrio y armonía. Fue creada en Australia y resulta ideal para embarazadas, personas mayores y quienes huyen de las actividades muy intensas; ¿quiere usted probar?
Las llamadas “gimnasias suaves” o slow gyms han desplazado a los ejercicios aeróbicos y de alto impacto de los gimnasios de prestigio en las grandes urbes donde el estrés es un mal endémico. La oferta ahora es practicar actividades físicas que permitan ponerse en forma de manera suave y cuidar tanto el cuerpo como la mente, tal como lo han hecho disciplinas orientales como tai-chi chuan o yoga.
No todo mundo tiene el interés o el tiempo de realizar ejercicios de alto gasto energético, como correr a toda velocidad o practicar tae kwan-do; más bien lo que buscan los habitantes de las grandes ciudades es relajarse después de arduo día de trabajo, y si además se hace ejercicio los beneficios se duplican. El objetivo ya no es únicamente ponerse en forma, adelgazar o tener un cuerpo espectacular, también hay que cuidar mente y alma.
Eso es precisamente lo que ofrecen las gimnasias suaves, siendo una de ellas bodybalance, alternativa para quienes el ejercicio intenso no es la mejor opción, por ejemplo, embarazadas, adultos mayores o simplemente aquellas personas que no gustan del boxeo, la bicicleta fija o la natación, que se sienten incapaces de hacer aerobics o quieren aumentar su espiritualidad.
Las clases de bodybalance se imparten en grupos y se acompañan de música especialmente seleccionada, principalmente sonidos de la naturaleza o lo que ahora se hace llamar new age, que son melodías instrumentales muy relajantes. Al final de la sesión, que tiene una duración aproximada de 60 minutos, usted sentirá flexibilidad, equilibrio, fuerza y vigor.
Este programa de entrenamiento fue creado por la compañía australiana Les Mills y conjunta estiramientos, tonificación muscular y relajación, de manera divertida y mediante coreografía al ritmo de la música. Los ejercicios son tan bien diseñados que desde el momento del calentamiento se está trabajando en el fortalecimiento de los músculos abdominales.
Como corresponde a las disciplinas orientales, se da particular importancia a la respiración, pues de ella depende el óptimo flujo de energía y cuya obstrucción es en alto porcentaje causa de enfermedades. Es así que igualmente se trabaja en corregir posturas que impiden el libre transito de energía, así como malos hábitos alimenticios, de manera que se estimule a los órganos internos para lograr, finalmente, un equilibrio entre fuerzas interior y exterior.
Al terminar la clase siempre se dedican algunos minutos a la meditación, por lo que se termina totalmente relajado, lleno de energía y con buen humor.
Si usted es seguidor de disciplinas orientales como yoga, tai-chi chuan, artes marciales o técnicas como pilates, bodybalance puede ser extraordinario complemento con el conseguirá un enfoque más amplio de integración mente-cuerpo.
Finalmente, es importante destacar que los creadores de este programa australiano supervisan permanentemente la evolución del mismo en todo el mundo, y están al tanto de las novedades y tendencias que brinden mejores resultados. Países latinoamericanos como México se mantienen a la expectativa del arribo de lo último en esta extraordinaria disciplina, la cual ya empieza a despertar gran interés.