LaSalud.mx.- Los dolores de cabeza son comunes en adolescentes y en la mayoría de casos, no son síntomas de un problema médico grande; pero cuando los dolores de cabeza continúan, es mejor evaluar la situación. Además, se puede adoptar en casa ciertas medidas para ayudar a reducir los dolores.
La Dra. Jennifer Fisher, Psiquiatría Infantil y del Adolescente de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota, explica que existen varios tipos de dolor de cabeza. Dos de los más comunes son los dolores de cabeza por tensión y migrañas. Los dolores de cabeza por tensión, se describen como la sensación de tener colocada una cinta apretada en la cabeza, a diferencia de las migrañas que suelen ocasionar intensas pulsaciones en un lado de la cabeza y pueden presentarse acompañadas por náuseas, vómito y sensibilidad a la luz y al sonido.
Los diferentes tipos de dolor de cabeza tienen una amplia variedad de desencadenantes. Si es por tensión, incluyen estrés, cólera, ansiedad, depresión, tensión muscular, cansancio, mala postura, falta de ejercicio, problemas del cuello y mandíbula, así como ciertos medicamentos. En las migrañas, participan ciertos alimentos, cambios hormonales, medicamentos, cambios en el sueño y ejercicio, factores ambientales (como luces brillantes, olores fuertes y ruidos altos), asó como el estrés, cuyo alivio puede provocar de alguna manera un ataque en ciertas personas.
Con el fin de obtener un cuadro más claro del dolor de cabeza, motive a su hija o hijo a llevar un registro que incluya cuándo empieza el dolor de cabeza, qué tan fuerte es en escala del cero al diez, actividades realizadas ese día, hábitos de sueño y alimentación. Ese registro puede ayudarla/o a observar patrones en los dolores de cabeza, permitir identificar y evitar los desencadenantes, así como controlar la respuesta al tratamiento.
La Dra. Fisher comenta que si los dolores de cabeza diarios continúan o se tornan más fuertes, haga una cita con el médico de su hija para que se le realice un examen físico y neurológico para realizar una evaluación minuciosa de los posibles desencadenantes del dolor de cabeza. Lleve a esa cita el registro de su hija sobre los dolores de cabeza.
Es posible que el médico pregunte sobre cambios que ocurren en la vida, tales como si ha aumentado el nivel de estrés, si duerme por lo menos 8 o 9 horas diarias, si hace ejercicio con regularidad o si su alimentación es diferente.
Es posible que sea necesario realizar análisis para entender mejor los dolores de cabeza. Eso suele incluir la obtención de imágenes cerebrales, por lo general una resonancia magnética. Sin embargo, no siempre es necesario realizar exámenes.
El tratamiento de los dolores de cabeza se basa en el tipo y en cuánto interfiere con la vida de la persona. Podría ser que su hija/o sienta la tentación de faltar al colegio o no participar en actividades para descansar. Por lo general, los adolescentes lidian mejor con los dolores de cabeza cuando se involucran completamente en los estudios, eventos sociales y actividades extracurriculares. La mayoría de adolescentes necesita realizar algunos cambios en su estilo de vida para reducir los dolores de cabeza, entre ellos, convertir el sueño sano en una prioridad, hacer ejercicio, ingerir una dieta sana y reducir el estrés.
Los fármacos de venta libre y los medicamentos recetados que existen para tratar y prevenir los dolores de cabeza pueden ser útiles. Sin embargo, es preferible realizar cambios en el estilo de vida para controlar los dolores en lugar de tomar medicamentos, ya que la mejoría que realiza estos cambios, evita los efectos secundarios de los medicamentos, previene los dolores de cabeza de rebote y promueve el bienestar continuo.
Si lo dolores de cabeza no acaban después de ver al médico y realizar algunos cambios en el estilo de vida, podría referir a su hija/o a un neurólogo para evaluar más a fondo sus dolores de cabeza o a un psicólogo especializado en el manejo del dolor crónico y la prevención de dolores de cabeza.
Los psicólogos experimentados en intervenciones cognitivas conductuales o medicina del comportamiento pueden ser útiles para los adolescentes que desean optar por un estilo de vida sano y mantener con el tiempo hábitos alimentarios sanos.