Ancestralmente las mujeres tenemos cierta fama de neófitas de la tecnología, de tener una actitud pasiva sino es que temerosa frente a ella, tanto que los hombres eran nuestros salvadores cuando de conectar un reproductor de audio o video en casa se tratara. No fue distinto con la llegada de las computadoras y la entrada al ciberespacio, pero ciertamente era sólo falta de práctica, de intentarlo nosotras mismas y romper esas barreras mentales casi subliminales que nos involucraban sólo en la tecnología cuando de electrodomésticos se tratase, prueba de ello es que nos hemos convertido en ases cibernautas, que aprovechamos todas las ventajas de la web para facilitarnos la vida, para comunicarnos, para prepararnos, informarnos y realizar compras en el inmenso almacén online.
No cabe duda que el Internet ha revolucionado y continua revolucionando nuestra sociedad en muchos aspectos, uno de ellos es también el papel de la mujer, pues el Internet da voz y voto a las reivindicaciones, opiniones y decisiones de las mujeres más allá de las fronteras de cada país.
En la actualidad, el colectivo de mayor interés por el mundo en línea es el femenino, y dado que casi el 48% de internautas en el mundo son mujeres, según cifras de ComScore, nos hemos convertido en el objetivo de muchas marcas. De tal suerte que, los sectores económicos buscan un mayor acercamiento, anunciantes, agencias y medios de comunicación, más aún si tomamos en consideración el estudio publicado por el portal de comercio electrónico Mercado Libre, que reveló que de la totalidad de mujeres internautas, el 79% compra o vende a través de Internet.
Día a día usuarios nuevos se adhieren al cibermundo, y en poco más de seis años se ha duplicado la cantidad de usuarios de Internet en nuestro país, alcanzando más de 40 millones de usuarios. Tan sólo en el 2012, en México el comercio electrónico a través de Internet se incrementó un 40% con respecto al año anterior (AMIPCI), aumentando también los millones de pesos que se mueven virtualmente en el país.
Particularmente, para el sector femenino las ventajas de la compra-venta en línea son: los precios, la variedad, comodidad y facilidad para realizar las transacciones, además de que se puede obtener información detallada de los artículos en cuestión. En las mujeres, la tecnología es el área más solicitada en cuanto al comercio electrónico (73%), seguida por moda (50.5%), libros (32.2%) y viajes (28.5), y poco más de la mitad gastan entre $500 y $2,000 en estas compras.
Si bien el comercio electrónico no está entre las primeras cinco actividades que realizan las internautas mexicanas en la web (correo electrónico, buscar información, redes sociales, contacto con personas cercanas y estar al tanto de las noticias), es un aspecto con un potencial de crecimiento enorme. Lo que ha resultado en buscar inminente qué productos, soluciones, servicios o aplicaciones se requieren impulsar para satisfacer a este exigente segmento de mercado con semejante potencial.
Hombres y mujeres usamos Internet de formas distintas. La mujer utiliza herramientas tecnológicas para complementar aquello que ya hace en su vida cotidiana, y el ciberespacio se ha convertido en una herramienta fundamental para el desarrollo de proyectos y la difusión de nuevas ideas que han permitido la realización de muchas mujeres emprendedoras.