Durante el Seminario Mitos y Realidades de la Industria Tabacalera y el Tabaquismo en México, que llevó a cabo en las instalaciones del Senado de la República dio a conocer las opiniones de senadores que juegan un rol decisivo en el impulso de políticas para el control del tabaco durante la LXII Legislatura, una de ellas es el incremento al impuesto del tabaco; en esta reunión se ofreció además referentes analíticos e informativos para contrastar los mitos que la industria promueve en sus posicionamientos públicos.
En este Seminario participaron los senadores María de los Dolores Padierna, Salvador López Brito y el periodista Juan Núñez Guadarrama. Una de las acciones de intervención que utiliza la industria tabacalera para influir en políticas públicas a su favor, es el uso de datos, evidencia y fuentes de información que carecen de sustento y que difícilmente pueden ser comprobados.
Dolores Padierna Luna, comentó que el 10 por ciento de los fumadores activos logra dejar de fumar, el panorama no es muy alentador cuando se cuenta tan sólo en México con 14 millones de fumadores activos. El hábito de fumar y cáncer pulmonar –dijo- están estrechamente vinculadas y que, por esta causa mueren 60 mil personas al año. Las Mujeres, adolescentes y jóvenes son el blanco de las tabacaleras, es por ello la urgencia de legislar en la ley del impuesto y ley general para el control del tabaco, pues aseguró que el aumento de impuestos está estrechamente relacionado con el descenso en el consumo del tabaco.
Adicionó que los objetivos de las corporaciones tabacaleras y el desarrollo de políticas efectivas de salud pública son irreconciliables. Puesto que cuando un gobierno admite su influencia, está protegiendo las ganancias de la industria del tabaco a costa de la vida y la salud de la población. La legislación en materia de publicidad y patrocinio; de investigación; de revisión e impresión de imágenes en cajetillas de cigarrillos son los principales puntos a legislar.
Los senadores comentaron que por presiones de las tabacaleras no se avanzó en las iniciativas relacionadas al tabaco, sobre todo en relación su consumo en lugares cerrados. La Canirac comenzó a presionar generando inequidad entre el resto de quienes si respetan la ley en esta materia, y entre quienes han desarrollado las condiciones para su aplicación. El DF está de acuerdo en que se suba el impuesto al tabaco, por el contrario a lo que la industria tabacalera anticipaba “El objetivo es que las tabacaleras no se resistan a los cambios que la agenda legislativa tiene”.
Se enfatizó que “el control de los puntos de ventas es fundamental para cumplir con este objetivo” ya que se sugirió convertir como ilegal la venta de cigarrillos en el ambulantaje, partiendo de un nivel local, ayudará en demasía a disminuir la incidencia del tabaquismo, “en la comisión de salud es donde se iniciará esta labor, para luego comenzar el trabajo en el resto de las comisiones” aseguraron.
Los desafíos en materia de salud pública son retadores y urgentes para evitar el colapso del sistema nacional de salud por este padecimiento, causado principalmente por el tabaquismo. La finalidad, es aprovechar las partidas presupuestales pues el aumento en estos recursos no es necesario ya que la prevención y la legislación debe ser un recurso importante y primordial para evitar este colapso.
La ley deber ser fortalecida y modificada para el contexto que se vive en esta materia. Los programas deberán ser evaluados y las campañas deben sustituir a los programas gubernamentales en el combate al tabaquismo. Por eso se antoja urgente la modificación en materia de legislación del tabaco.