Hay que tener en cuenta que durante la lactancia materna no es recomendable hacer ningún tipo de restricciones alimenticias, ya que la madre necesita ofrecer a su hijo los nutrientes esenciales que necesita para su crecimiento y desarrollo.
Una de las mejores ayudas para perder peso después del parto, la constituye amamantar, al igual que el consumo de ciertos alimentos, como el repollo morado, la zanahoria, las frutas con contenido de vitamina C y los pescados blancos, los cuales son esenciales para perder peso.
También son beneficiosos el apio, el limón, la uva, la papaya, la avena, alimentos ricos en fibra, los cereales integrales y frutos secos, incluyendo alimentos de los diferentes grupos nutricionales.
Debe reducir las grasas saturadas, aumentar el consumo de agua, para mantener el organismo hidratado y comer cinco veces al día, tratando de incluir todos los nutrientes, sin olvidar la práctica de ejercicio físico, que ayudará a eliminar esos kilos de más.