Científicos mexicanos analizarán el ADN de los restos atribuidos a la poeta Sor Juana Inés de la Cruz y los compararán con el de los descendientes de su hermana o el de su sangre plasmada en un documento para verificar su autenticidad, dijo a Efe Carmen López-Portillo Romano.
López-Portillo, rectora de la Universidad del Claustro de Sor Juana de Ciudad de México, explicó que este examen servirá para despejar todas las dudas sobre los restos óseos de la escritora y decidir el lugar en el que deben permanecer.
“El doctor Arturo Romano Pacheco, quien descubrió la osamenta, tiene interés en demostrar la autenticidad”, explicó la rectora, y añadió que otro grupo llevará a cabo una consulta para definir dónde deben reposar los restos, “si en el Claustro, en la Rotonda de Hombres Ilustres (en la capital mexicana) o en Napantla (cercanías de Ciudad de México), donde vivió su infancia”.
La rectora agregó que, en su opinión, deben permanecer en el Claustro, porque la escritora decidió vivir y morir en ese lugar, antiguo convento de monjas jerónimas, donde escribió las comedias y versos que conforman su vasta obra literaria.