LaSalud.mx.- En el marco del Encuentro Latinoamericano para la Fertilidad, en pasado 27 de junio en Sao Paulo, Brasil, más de 200 personas, entre pacientes, médicos, estudiantes y diferentes grupos de interés, se reunieron para discutir el acceso de la población afectada a un tratamiento de reproducción asistida en Latinoamérica.
La mexicana Sandra de la Garza, fundadora de la Asociación Mexicana de Infertilidad estuvo presente como presidente de Red TRAscender, ONG organizadora del evento, en el que se abordaron varias cuestiones relevantes entre ellas, la experiencia de países como Argentina y Chile para validar una ley que protege a los afectados, así como las barreras que Brasil ha tenido que enfrentar para lograrlo.
El tema más importante tratado durante el evento fue la lucha por la inclusión de la reproducción asistida en la lista de procedimientos de seguros populares, así como garantizar que los seguros privados cubran dichos tratamientos.
“Este es el tipo de eventos en donde se pueden comparar las acciones, logros y avances de cada país, y nos sirven para aprender y aplicarlos en el nuestro, que es uno de los más rezagados en apoyo a la fertilidad. Por ejemplo, en Brasil cientos de parejas infértiles han tenido que salir a la calle con carriolas vacías y pancartas para ser escuchados… los mismos afectados son los protagonistas de la proliferación de la información y tienen el poder de movilizarse para cambiar las cosas en el país”. Comentó Sandra de la Garza.
En México el 20 por ciento de las parejas son infértiles y necesitan un presupuesto de 50 mil hasta más de 100 mil pesos para iniciar tratamientos de reproducción asistida, mucho menos de la mitad de esta población no tendrá alguna oportunidad de probar los tratamientos, su única oportunidad sería recibir ayuda de los seguros populares y una ley que los ampare.
Según Sandra de la Garza, el mes pasado en Uruguay se inició el primer procedimiento de alta complejidad amparado por la nueva ley de reproducción asistida. El tratamiento era valorado en 12,000 dólares que la pareja no podía solventar y a través de la nueva ley únicamente tuvieron que pagar 2.92 dólares (47 pesos mexicanos). “Esta es una realidad que ya sucede en otros países de Latinoamérica, no podemos quedarnos atrás. Debemos hacernos escuchar, las organizaciones no gubernamentales deben de tomar la responsabilidad de dirigir movimientos y movilizar a la población para que gobierno, instituciones y opinión pública se den cuenta del gran problema que existe.”, concluyó.
Durante el evento, Sheryl Vanderpol, del Departamento de Salud Investigación Reproductiva y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseguró, a través de videoconferencia, que “todos tenemos el derecho fundamental de elegir una familia y la infertilidad es una enfermedad y debe ser tratada como tal. Este es un derecho universal y es de esperar que cada país cumpla con su papel de proveedor de la igualdad de derechos.”