Unos glúteos bonitos pueden ser uno de los centros más atractivos del cuerpo, siempre y cuando se hayan trabajado para fortalecerlos y darles forma. Con el paso de los años, (sobre todo las mujeres) tienen la tendencia de acumular grasa en esta zona de la fisionomía, siendo esta área muy sensible de sufrir celulitis y exceso de acumulación de grasa.
Para modelar la parte trasera del cuerpo, nada mejor que dedicar de cinco a diez minutos diarios para trabajar y dar forma a la musculatura del glúteo. Un poco de ejercicio regular, acompañado con algo de dieta, intensificará los resultados.
Eliminar o evitar azúcares refinados, embutidos, productos salados y/o fritos y demás alimentos excesivamente grasos es el primer paso a seguir en cuanto a la dieta para evitar la temida celulitis o piel de naranja.
La alimentación debe ser lo más sana posible: verduras, frutas, cereales integrales, legumbres, pescado, aceite de oliva (no frito), frutos secos (en cantidades pequeñas), etc.
Es aconsejable beber dos litros de agua al día, para ayudar a drenar y a eliminar las toxinas acumuladas en nuestro cuerpo.
En cuanto al ejercicio, las sentadillas es lo más recomendable. Subir escaleras, correr, dar patadas o practicar kickboxing, body combat, spinning o aguagym, también te ayudarán a poner el trasero “en su sitio”.