El Médico Bariatra David Montalvo Castro, Presidente electo del Colegio Mexicano de Bariatría, A.C., explica que una madre que come saludable es un ejemplo a seguir para sus propios hijos y su pareja. En cambio, los patrones de conducta alimentaria de una madre obesa quedarán grabados en la mente de sus hijos, en las costumbres y en los gustos más fuertemente arraigados, teniendo el doble de posibilidades de desarrollar obesidad y otras enfermedades graves que los hijos de una mujer sana
El mejor regalo que puede desear una madre es mantener una buena salud los 365 días del año para tener la energía y fortaleza necesariaspara disfrutar plenamente de su familia y de la realización de todas sus actividades. El tener salud no es solamente la ausencia de enfermedad es, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el estado de bienestar biológico, psicológico y social del individuo. En el caso de la mujer esta expresión de “bienestar” tiene diferentes significados en función de la etapa de la vida en que se encuentre y en relación con la función reproductiva.
De lo anterior, el Médico Bariatra David Montalvo Castro, Presidente electo del Colegio Mexicano de Bariatría, A.C., explica: “Desde que llega a la edad fértil, una mujer será más saludable mientras mejor preparado esté su cuerpo para poder concebir. En el embarazo el estado de salud abarca el binomio madre-hijo, una buena nutrición hará que la madre esté en las mejores condiciones físicas posibles para el buen desarrollo del producto. En la lactancia, la señora es la única fuente de alimento y aporte de nutrimentos para su bebé, por lo que debe gozar de una salud plena en esta etapa. Durante el crecimiento y desarrollo de los hijos, la madre necesita conservarse sana y llena de energía para atender la agotadora tarea de la crianza y educación. Y finalmente, en la etapa postmenopáusica, si la mujer tuvo una nutrición adecuada podrá tener una vejez saludable con huesos sólidos y fuertes”.
Mamás vivas y radiantes en toda época
El cuidado de la salud es una responsabilidad con la que se debe cumplir todos los días del año. Por eso resulta importante que las madres se informen y aprendan cómo balancear el menú de cada día para ella y su familia. Además de consumir los alimentos propios de cada estación, pues contienen los nutrientes que requiere el organismo para ese clima y para protegerlo del riesgo de contraer ciertas enfermedades.
Una madre que come saludable es un ejemplo a seguir para sus propios hijos y su pareja, quienes pueden estar inclinados a tomar decisiones más sanas dentro y fuera de la casa, de este modo fomenta la educación alimentaria dentro del seno familiar. También es necesario establecer un programa individualizado de alimentación y ejercicio, así como evitar tener más de tres horas de permanencia sedentaria, lo cual permitirá que su familia y ella prevengan sobrepeso y obesidad.
“El cuerpo se renueva cada día con alimentos y nutrientes que consumimos. Tener una alimentación de mala calidad es tener un cuerpo, una salud y una vida de mala calidad, y arrastrar consecuencias graves como desnutrición, malnutrición, sobrepeso, obesidad, osteoporosis, diabetes, hipertensión, accidentes vasculares, infartos, cáncer, hígado graso, por mencionar algunos. Se debe ser prudente y comer con moderación todo el año. Recuerde que los patrones de conducta alimentaria de una madre obesa quedarán grabados en la mente de sus hijos, en las costumbres y en los gustos más fuertemente arraigados, teniendo el doble de posibilidades de desarrollar obesidad que los hijos de una mujer sana. La alimentación y los cuidados que se tengan en la vida cotidiana tienen un impacto mayor en el estado de salud. La constancia da resultados duraderos”.
Recomendaciones generales
- Para las madres que trabajan en casa, la recomendación es evitar el “picar” todo el día, pues no contabilizan el alimento consumido y al final puede significar una cantidad importante que rebasa por mucho sus verdaderas necesidades. Al respecto, el Bariatra recomienda hacer tres comidas básicas con dos colaciones, una a media mañana y otra a media tarde.
- Para la madre que trabaja fuera de casa, se le aconseja no consumir pastelillos, pan dulce, papas fritas, frituras de maíz, palomitas y golosinas acompañadas de refresco azucarados, que se encuentran fácilmente en las misceláneas y tiendas de conveniencia, pues su consumo implica una ingesta excesiva de carbohidratos refinados que pueden calmar el hambre, pero no aportan una nutrición equilibrada. Es mejor hacer el esfuerzo por llevar su comida casera al trabajo y consumir fruta en las colaciones.
- Siguiendo las recomendaciones que se han dado y planificando, en vez de improvisar, se puede lograr tener una alimentación completa, balanceada, equilibrada. La planeación de cada día, de cada semana, mes o año le dará ventajas importantes para nutrirse bien de acuerdo a un presupuesto. La ejecución de lo planeado y ajustarse a lo presupuestado también es fundamental.
- Para que se mantenga saludable debe encontrar el equilibrio entre la cantidad de energía que ingiere y la que gasta con el ejercicio y con las actividades cotidianas. La práctica del ejercicio le ayudará a liberar el estrés, oxigenar mejor sus órganos, frenar el envejecimiento y llevar una vida plena y saludable.
- La madre debe recurrir a su Médico especialista en Nutrición Clínica y Bariatra, que es el profesional de la medicina mejor preparado para orientar a las personas acerca de la prevención de la obesidad, malnutrición y desnutrición, quien le ayudará a tener un resultado exitoso en cada etapa de su proyecto de vida.