La pintora, escultora, grabadora, escritora, dramaturga y escenógrafa Leonora Carrington cumple hoy 94 años.
Con ese motivo, el Centro Cultural Estación Indianilla ha organizado una exposición de 10 esculturas nuevas de la Premio Nacional de Artes 2005, que será inaugurada el sábado 9, a las 12:30 horas, en Dr. Claudio Bernard 111, colonia Doctores.
También se abrirá una muestra de 15 esculturas, en su mayoría desconocidas, de Gunther Gerzso (1915-2000), quien fue amigo de Carrington. Seguramente no faltará el pastel.
La artista surrealista, por otro lado, acaba de crear un nuevo personaje: El rey del tequila, que hará pareja con La reina del tequila, que salió de su inventiva en 2007, para una licorera de la edición especial 1800 Colección, de Tequila Cuervo. Al parecer, la nueva escultura en plata es del doble en tamaño de la mujer-maga con atributos zoomorfos, de 35 x 15 x 10 centímetros.
Espacio escultórico en Tequila
Isaac Masri, responsable del Centro Cultural Estación Indianilla, explica que Leonora Carrington trabajó hace dos años las últimas piezas de escultura del proyecto.
En dos décadas que trabajaron juntos hicieron cerca de 45 obras, entre ellas varias monumentales de carácter público, en bronce, las cuales Masri las describe como muy delicadas, muy bonitas
.
Los títulos son Rostro águila, Dama y zorro, Barca con chango, Stallion, Paseo a caballo, Minotauro, Máscara con gato, Silla, Nigromante y Dama con tocado. Las medidas varían entre 204 x 74 x 100 centímetros (Dama y zorro) y 63 x 29 x 80 centímetros (Barca con chango).
El promotor cultural adelanta que no quisieron hacer una retrospectiva de la obra de Carrington, “porque hemos exhibido cada dos o tres años muestras de su trabajo
”.
Agrega, “creo que vamos muy bien con el proyecto escultórico de Leonora, porque ya pusimos en San José del Cabo, en una marina llamada Puerto Los Cabos, una especie de exposición como teníamos en Paseo de la Reforma con fotografías de su obra pictórica y textos”.
Por otro lado, “las personas de Tequila Cuervo decidieron hacer un espacio escultórico –la museografía estará a cargo de Masri– en Tequila, Jalisco, ya que han coleccionado obra de la artista. Leonora ha hecho dos obras especialmente para la empresa, una que se llama La reina del tequila, presentada hace cuatro años y ahora El rey del tequila”.
El entrevistado propuso a Carrington exhibir también la obra de Gerzso. De hecho, cuando la artista llegó a México en 1942 entró en contacto con un círculo de inmigrantes de diferentes países, donde también estaba el pintor y diseñador escénico Gunther Gerzso, mexicano de nacimiento, pero de ascendencia húngaro-alemana y educado en Europa.
En 1944 Gerzso pintó Los días de la calle Gabino Barreda, cuadro en el que Leonora Carrington aparece como un torso femenino envuelto en una enredadera y él como una cabeza que se asoma de una pequeña caja.
Las esculturas de pequeño formato de Gerzso forman parte del proyecto Homenaje a la línea recta, realizado en 1998 por invitación de Isaac Masri, quien originalmente se había acercado al artista tres años antes con motivo de la exposición colectiva Libertad en bronce.
En los últimos momentos de su vida, ya hospitalizado, Gerzso decidió donar una de esas 15 esculturas a la ciudad de México, que se hizo en grande y se colocó en la intersección de Barranca del Muerto y Periférico Sur, expresa Masri.
Fisuras sexuales se encuentra en ese lugar desde el 26 de noviembre de 2000.
También se publicó el libro Gunther Gerzso: homenaje a la línea recta. 15 esculturas en bronce (Impronta Editores), con poemas de David Huerta.
Quince obras de Gerzso
En el texto que hizo para el volumen, Masri escribe: “En 1998 le propuse este nuevo proyecto y tras sus consabidas y amistosas quejas iniciales, aceptó y en pocos meses tenía los planos definitivos de 15 piezas que se realizaron en aproximadamente un año, bajo su severa y atenta supervisión, que abarcó hasta el más mínimo detalle del proceso”.
“Posteriormente se invitó a David Huerta a ver las esculturas y colaborar con el libro, invitación que David aceptó entusiasmado y escribió un poema para cada una de las obras, cuyos títulos adoptó Gerzso para sus esculturas, no sin antes comentarme: ¿no le parecen, señor mío, que son absolutamente eróticos
”.
Ni la obra ni el libro llego a presentarse, ya que Isaac Masri quería que el artista inaugurara la exposición, cosa que no fue posible cumplir, debido a su fallecimiento.
Hoy es un buen momento porque, además de ser de los grandes amigos de Leonora, es de los grandes artistas mexicanos
, señala el promotor cultural.